Catedral de Tarragona

Importantes monumentos del pasado medieval de Tarragona aún se conservan y, junto al legado romano, enriquecen el patrimonio artístico de la ciudad. El ejemplo más destacado de esta herencia medieval es la Catedral de Tarragona, un conjunto monumental de gran relevancia.
La Catedral de Tarragona fue construida aproximadamente en el mismo emplazamiento donde en la antigüedad se alzaba el templo romano. Las obras comenzaron en el siglo XII en estilo románico y continuaron durante el período gótico. El edificio fue consagrado en 1331, aunque no llegó a completarse debido a la peste negra que asoló la región.
El gran portal y el rosetón de su fachada son una de las imágenes más emblemáticas de la ciudad. En la entrada del claustro se encuentra el Museo Diocesano y el espectacular retablo de Santa Tecla. La obra escultórica del claustro es uno de los ejemplos más sobresalientes del arte románico en Cataluña y data de principios del siglo XIII.
En cuanto al Museo Diocesano, destacan sus colecciones de arte religioso medieval y moderno procedentes de Tarragona y su diócesis, entre las que se incluyen retablos, esculturas en piedra y madera, orfebrería, forja, tejidos, cerámica y mucho más.
Foto: © Manel Antolí (RV Edipress) / Tarragona